Revista SPN 2009-II - Sociedad Peruana de Neurología
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Revista SPN 2009-II - Sociedad Peruana de Neurología
Revista Peruana de NEUROLOGÍA órgano Oficial de la Sociedad Peruana de Neurología (Antigua Sociedad Peruana de Psiquiatría, Neurología y Neurocirugía) NOVIEMBRE 2009 NÚmeros 1-3 ISSN 1561-3178 FEDERACIóN DE REVISTAS NEUROLóGICAS EN ESPAÑOL Sociedad Peruana de Neurología Revista Peruana de Neurología Editor Luis Torres Ramírez Junta Directiva 2008-2010 Presidente Dr. Juan de Dios Altamirano del Pozo Vicepresidente Dr. César Abel Castañeda Díaz Secretario general Dr. Carlos Alberto Cosentino Esquerre Secretario de acción científica Dr. Nilton Custodio Capuñay Tesorera Dra. Karen Rivera de Estrada Comité Editorial Dra. María Meza Vega Dra. Patricia Campos Olazabal Dra. Liliana Rodríguez Kadota Dr. Luis Deza Bringas Dr. Julio C. Alfaro Mantilla Dr. Nilton Custodio Capuñay Dr. Darwin Vizcarra Escobar Dr. Martín Gavidia Chucán Dr. Edgar Rojas Huerto Dr. Federico Micheli (Argentina) Dr. Juan Obeso (España) Secretario de actas Dr. Óscar del Brutto (Ecuador) Vocal de filiales La Revista Peruana de Neurología (ISSN 1561-3178) es una publicación de la Sociedad Peruana de Neurología de aparición cuatrimestral, en los meses de abril, agosto y diciembre. Costo de suscripción anual: $60 para individuos y $80 para instituciones. Ninguna parte de la Revista Peruana de Neurología podrá ser reproducida sin el consentimiento escrito del Editor. Dr. Isidro Huarcaya Rodríguez Dra. Jesús Jovic Muñoz Vocal de relaciones institucionales Dr. Hugo Félix Umeres Past presidente Dr. Óscar Gonzales Gamarra Sociedad Peruana de Neurología Calle Colón 110 of. 208, Miraflores. Lima 18, Perú. Telefax: (51-1) 2428761 Email: [email protected] [email protected] www.spneurologia.org.pe Para los asuntos relacionados con la Revista Peruana de Neurología dirigirse al Editor Calle Colón 110 Of. 208, Miraflores. Lima 18, Perú. E-mail a: [email protected] o [email protected] Revista Peruana de Neurología es editada e impresa por Revistas Especializadas Peruanas SAC (REP SAC), editores médicos especializados. Miguel de Cervantes 485-502. San Isidro. Lima 27, Perú. Teléfonos: 421-5712/ 999-658531 [email protected] Editor médico: Dr. Jorge Candiotti Vera S.A.C. Rev Per Neurol 2009 Vol 11 1 Revista Peruana de NEUROLOGÍA Contenido EDITORIAL Dr. Luis Torres-Ramírez…………………………………………………………………… 4 TRABAJOS ORIGINALES • Costo médico directo de la epilepsia en una población hospitalaria de Lima, Perú. Dr. Proel Pérez-Galdos …………………………………………………………………………… 5 • Terapia trombolítica en un hospital nacional: una nueva expectativa … ………… en la enfermedad cerebral vascular isquémica. Dres. Miguel Quiñones, Elizabeth Bujaico, César Castañeda, José Vera… ………………… 13 TEMAS DE REVISIÓN • Deterioro cognitivo en pacientes con esclerosis múltiple Dres. Nilton Custodio, Juan Altamirano, Rosa Montesinos, David Lira, Juan Escobar, Hernando Torres.… ………………………………………………… 19 NOTAS CLÍNICAS • Encefalopatía de Hashimoto. reporte de un caso. Dres. Elliot Barreto-Acevedo, Marco Zúñiga-Gamarra, Gaby Vera-Ortiz … ………………… 26 • Cefalea crónica en un paciente con esquisencefalia Dres. David Lira, Nilton Custodio, Liliana Bendezú, Elías Lira… …………………………… 31 RESÚMENES DEL CONGRESO DE NEUROLOGÍA 2007 • Síndrome de pares craneales como compromiso oncológico en el linfoma nasal de células t/nk. Dres. Barreto J, Romero R, Sánchez M, Pezo M, Gonzales W.… …………………………… 34 • Autotransfusión de células madre y síndrome de Guillain-Barré. Dres. Aquino-Peña F. Chumbe M, Crovetto L, Cam L.… ……………………………………… 34 • Esclerosis múltiple: experiencia en el Hospital Alberto Sabogal años 2003-2007 2 Dres. Rentería J, Cruz A, Corro E.… …………………………………………………………… 35 Rev Per Neurol 2009 Vol 11 • Pseudoxantoma elástico y ACV: A propósito de un caso Dres. Gutiérrez-Ternero J, Camargo-Salazar I, Cáparo-Gómez C, Delgado-Vial H.… ……… 35 • Miastenia gravis juvenil en el Hospital Nacional Guillermo Almenara Dres. Molina-Jara ME, Huertas-Navarro MA, Vera-Raggio J, Castañeda-Díaz C.… ………… 36 • Trombosis venosa cerebral: caso clínico Dres. Rodríguez L, Gavidia M, Rivara A.……………………………………………… 36 • Esclerosis múltiple y psicosis Dres. Terán-Serrano A.… ………………………………………………………………………… 37 • Prevalencia de la enfermedad de Fabry en pacientes con insuficiencia renal crónica en Perú Dres. Tumialán PC, Carvallo C, Chávez R, López Z, Alcántara M, Pumacayo R, Villavicencio N, León K.… ………………………………………………………………………… 37 • Miastenia gravis correlato clínico epidemiológico y timectomía. Dres. Vera-Ortiz GM, Achata-Arenas J.… ……………………………………………………… 38 • Descripción clínica de la esclerosis múltiple en el Perú: revisión de casos. Dres. Vizcarra D, Tipismana M. … ……………………………………………………………… 39 •Narcolepsia en el Perú: descripción de 8 casos. Dres. Vizcarra D, Kawano J.… …………………………………………………………………… 39 • Síntomas del síndrome de apnea obstructiva del sueño e hipertensión arterial Dres. Vizcarra D, Kawano J, Tipismana M.……………………………………………………… 40 • Frecuencia de somnolencia diurna en una muestra de niños Dres. Vizcarra D, Kawano J.… …………………………………………………………………… 40 • Valoración de la utilidad del video- electroencefalograma en niños. Dres. Vizcarra D, Kawano J.… …………………………………………………………… 41 VIDA INSTITUCIONAL • Un congreso médico memorable Dr. Luis Deza-Bringas … ………………………………………………………………… 42 IN MEMÓRIAM • Dr. Guillermo A. Cruz Campos Dr. FJ Vadillo-Olmo… …………………………………………………………………… 48 • Dr. Juan Cabrera Valencia Dr. Darwin Vizcarra … …………………………………………………………………… 50 INFORMACIÓN PARA AUTORES … ……………………………………………………………… 52 Rev Per Neurol 2009 Vol 11 3 Editorial Nuestro agradecimiento a los integrantes de la Junta Directiva actual, que ha confiado en nosotros para encarar este nuevo proyecto de editar la Revista Peruana de Neurología, que en realidad es continuación de un proceso que ha tenido baches en el camino. En esta nueva etapa es compromiso de los miembros del comité editorial cumplir con los desafíos propuestos, necesitamos un vínculo estrecho entre editores y asociados, para que nos envíen artículos de calidad. Para ello deben percibir que la revista es un instrumento efectivo en la difusión de sus publicaciones. No escapa a vuestro conocimiento que la situación económica mundial atraviesa por momentos difíciles y la industria farmacéutica ha tenido que reducir sus gastos, hecho que influye en la edición de revistas biomédicas. La Junta Directiva ha encontrado la solución a esta situación y nuevamente tenemos la revista en circulación. Nuestro reto es conseguir la continuidad de la revista, con una publicación periódica, que contenga material suficiente en cantidad y calidad. Ambas premisas son difíciles de lograr, para lo que es indispensable la colaboración y el compromiso de todos los asociados. Los artículos no solo representan el objetivo de los autores, al tratar de difundir los hallazgos de las investigaciones, sino también supone un medio de promoción de los mismos. 4 Rev Per Neurol 2009 Vol 11 En este número, se incluye los trabajos originales realizados por el Dr. Proel Pérez Galdos, sobre un tema poco difundido pero a la vez interesante, y el Dr. Miguel Quiñónez y col., sobre la terapia trombolítica; un articulo de revisión, a cargo del Dr. Nilton Custodio y col., sobre el Deterioro Cognitivo en Esclerosis Múltiple, con conceptos actuales. También se destacan dos interesantes notas clínicas, una del Dr. Elliot Barreto Acevedo y col., y otra del Dr. David Lira y col. El Dr. Luis Deza nos transporta al pasado y con su excelente capacidad de comunicación nos hace vivir por instantes un Congreso Médico Memorable. Asimismo, presentamos los resúmenes de los pósters del XXI Congreso Peruano de Neurología de 2007, realizado en la ciudad del Cusco. Con profunda tristeza comunicamos el fallecimiento de dos eminentes neurólogos, los doctores Juan Cabrera y Guillermo Cruz, que dieron brillo y prestigio a la Neurología Peruana y cuyo Obituario e In Memóriam han sido escritos por el Dr. Darwin Vizcarra y por el Dr. FJ.VadilloOlmo, respectivamente. El segundo artículo fue publicado en la Revista de Neurología Española. Antes de finalizar, invoco el aporte científico de todos los miembros de la Sociedad, por que no hay revistas sin lectores ni autores. Luis Torres-Ramírez Editor Costo médico directo de la epilepsia en una población hospitalaria de Lima, Perú Medical direct cost of the epilepsy in a hospitable population from Lima, Peru Proel Pérez-Galdos RESUMEN Objetivo. Evaluar los costos directos de la epilepsia de una población hospitalaria de la Seguridad Social, durante el 2006. Señalar qué grupo de pacientes epilépticos tienen más costos directos. Metodología. Se realizó un estudio retrospectivo en 462 pacientes con epilepsia; para estimar los costos médicos directos, se consideraron el valor de venta, obtenido del tarifario de Essalud, y los precios de los fármacos antiepilépticos (FAE) genéricos, que son los más bajos del mercado nacional. El análisis estadístico fue descriptivo y analítico, se utilizó las pruebas de ji cuadrado y de t Student. Resultados. El 53,5% fueron varones, con un promedio de 40,7 años (DE + 22,03), el 17,7% de las epilepsias fueron refractarias, el promedio de consultas fue 6,26 (DE + 3,16), el 9,1% estuvo hospitalizado y el promedio de hospitalización fue 6,93 días (DE + 4,72). El costo directo anual fue 71 433,24 dólares; el costo directo promedio de la epilepsia controlada, 118,5 dólares y de la refractaria, 321,9 dólares (p < 0,0001). Conclusión. Los costos de consulta especializada (37 %) y FAE (34 %) representaron los mayores costos anuales, el costo directo promedio fue de: 154,61 dólares/paciente/año el costo promedio de la epilepsia refractaria fue tres veces mayor que la epilepsia controlada, los costos directos del presente estudio son muy inferiores a los países desarrollados y regionales. Palabras clave: Epilepsia. Antiepilépticos. Costo. ABSTRACT Objective. To evaluate the direct costs of the epilepsy a hospitable population of the Social Security (Essalud), during 2006. To indicate what group of patients with epilepsy has more direct costs Methodology. I realize a retrospective study in 462 patients with epilepsy; to estimate the direct costs, the price of sale – 19% IOS (imposed on sale) was considered the value of sale, obtained from the tariff of not assured, the prices of the generic antiepileptics drugs (AED) are the lowest of the national market. The statistical analysis was of descriptive and analytical type using chi square and t Student test. Results. 53,5% were men, an average of 40,7 years (SD + 22,03), the 17,7% were refractory epilepsy, the average of consultations was 6,26 (SD + 3,16), 9,1% were hospitalized, the average of hospitalization was: 6,93 days (SD + 4,72). The direct annual cost was 71 433,24 USD, the direct average cost of the controlled epilepsy was of 118,5 USD and of the refractory one of 321,9 USD (p < 0, 0001). Conclusion. The costs of specializing consultation (37%) and AED (34%) represented the major annual costs, the direct cost of average group was of: 154,61 USD/patient/year, the average cost of the refractory epilepsy was three times major; the direct costs of the present study are less expensive than those in developed and regional countries. Keywords: Epilepsy. Antiepileptics drugs. Cost. INTRODUCCIÓN Las enfermedades neurológicas son un motivo importante de atención médica en las diferentes etapas de la vida y ocasionan un gasto importante de recursos de la atención médica(1,2). Neurólogo asistente del Hospital II Miguel Grau, Essalud. Lima, Perú. Ricardo Palma 131-301, Urb. Covima, La Molina. Lima 12. Lima, Perú. Tf: (511)349-7746, Cel: (511)998-706946. E-mail: [email protected] La epilepsia constituye un grupo de trastornos caracterizados por la presencia de alteraciones crónicas, recidivantes y paroxísticas de la función neurológica; secundaria a un trastorno en la actividad eléctrica del cerebro. Rev Per Neurol 2009 Vol 11 5 Costo médico directo de la epilepsia en una población hospitalaria de Lima, Perú Las crisis epilépticas pueden tener un carácter convulsivo cuando se acompañan de manifestaciones motoras o bien, se pueden presentar con otro tipo de alteraciones en la función neurológica. Los cambios progresivos de la epilepsia sugieren la existencia del llamado intervalo silencioso, que a menudo dura años y puede estar relacionado con el antecedente de una infección del sistema nervioso central, traumatismo craneoencefálico, ataques febriles, etc.(3,4) y posteriormente aparecer la epilepsia. Se postulan alteraciones en la expresión génica y molecular de los individuos,(5,7) no obstante, puede aparecer en forma idiopática en personas que no presentan antecedentes de trastornos ni disfunción neurológica(3). Se considera a la epilepsia una condición médica devastadora.(8) Es tan antigua como la humanidad misma,(9) en el pasado se consideraba una enfermedad sagrada, se pensaba que las diferentes formas de manifestaciones epilépticas eran el resultado de la acción de varios demonios o espíritus malignos, un ataque epiléptico era por tanto, el inicio de una posesión diabólica y finalizaba cuando el demonio abandonaba el cuerpo.(10) Se sabe que no es una enfermedad “mágica”, pero en la actualidad potencia la estigmatización y un gran número de implicaciones psicosociales,(9) prueba de ello es la ocultación de la enfermedad, ocasionada en su mayoría por una vivencia social traumática de rechazo y falta del desarrollo social básico, propiciando individuos con dificultad para establecer relaciones interpersonales.(11) La epilepsia es considerada la enfermedad neurológica más frecuente en el mundo,(12,13) es un problema de Salud Pública no reconocido como tal en muchos países, especialmente en aquellos en vías de desarrollo, donde los indicadores epidemiológicos son hasta cuatro veces más altos que en el mundo industrializado, por lo que se postula una relación entre su frecuencia y el desarrollo económico.(14,15) En nuestros días, la epilepsia sigue siendo un problema de Salud Pública mundial y una causa frecuente de discriminación social. Este prejuicio causa mayor sufrimiento a los pacientes que sus propias crisis, y ha sido descrita ampliamente en diversos países y grupos sociales.(16) Esta enfermedad se presenta independientemente de la edad, raza, clase social y área geográfica. Afecta a 50 millones de personas alrededor del mundo, cifra posiblemente subestimada y se estima que a nivel mundial, al menos 100 millones de personas presentarán Epilepsia en algún momento de su vida.(3,17) Del total de personas con epilepsia, el 85% de éstas viven en los países en vías de desarrollo En América Latina, se considera que al menos 5 millones de personas y probablemente más padecen Epilepsia, de los cuales más de 3 millones no reciben tratamiento.(18) Las tasas de prevalencia de epilep6 Rev Per Neurol 2009 Vol 11 sia activa reportadas durante la década pasada en países latinoamericanos son más o menos similares entre sí (5 a 12/1000 habitantes), y no muestran mayor diferencia de la reportada en Rochester, EE. UU. (6/1000 habitantes), que representa a una población típica de un país desarrollado(19-21). Sin embargo esto no quiere decir que el riesgo de padecer epilepsia sea el mismo, como usualmente suele interpretarse, sino que debemos considerar otros factores tales como la posibilidad de una mayor mortalidad en individuos con epilepsia en países en desarrollo, lo que hace parecer que la frecuencia de epilepsia sea aparentemente menor en nuestros países. Las tasas más altas de prevalencia específica por edad en los países latinoamericanos, corresponden a los grupos comprendidos entre los 15 y 40 años de edad, a diferencia del estudio realizado en Estados Unidos, que al igual que otros países desarrollados, muestran una mayor prevalencia de epilepsia en los extremos de las edades; esto es, en la primera década de la vida y por encima de los 60 años de edad. Esto se debe a la diferente composición de edades de la población y posiblemente también a los diferentes factores de riesgo de la epilepsia entre estas dos poblaciones. La epilepsia representa un costo en muchos sentidos y con diferentes consecuencias para el paciente, siendo el costo más evidente el asociado al tratamiento farmacológico, sin embargo para la mayoría de las personas epilépticas la principal consecuencia desde el punto de vista económico es la limitación que sufre en su actividad laboral; la tasa de desempleo en las personas con epilepsia es inversamente proporcional al grado de control de las crisis y sensiblemente mayor que en la población general(22), a ello se suma la discriminación laboral, por que ocupan puestos de trabajo de categoría inferior a los que corresponden a sus habilidades y además de una mayor tasa de morbilidad y mortalidad prematura de las personas con epilepsia que la población general(23). Todos estos factores explican las altas tasas de ansiedad y depresión y la baja autoestima en los pacientes epilépticos(24). Además a de considerarse el impacto económico que ejerce esta enfermedad sobre la sociedad y sobre todo en países como el nuestro en los que los recursos son limitados y la prevalencia de la enfermedad es alta y más aún en los más pobres. Los trabajos de costo de la epilepsia tienen su inicio en el Congreso Internacional de Epilepsia celebrado en Oslo en 1993, donde se trata por primera vez este tema, originado por la repercusión económica de esta enfermedad en países como EE. UU., Australia, Indonesia, Suecia, Reino Unido y Suiza. La ILAE (Internacional League against Epilepsy) motivó la creación de la Comisión de Aspectos Económicos(25), para comunicar y orientar a todo el personal profesional de asistencia a estos enfermos. Los estu- P Pérez-Galdos dios y artículos publicados sobre este tema predominan en los países desarrollados y son muy escasos en los países en vías de desarrollo como los de Latinoamérica y África. La mayoría de los estudios publicados sobre aspectos económicos de la epilepsia son estudios de “costo-enfermedad”, apreciando una gran variedad entre ellos, mencionaremos los más importantes: En Australia, Bank y col.,(26) entre 1989 y 1990, calcularon que los costos anuales por cada paciente se aproximaba a los 2 000 dólares, siendo los costos directos el 25% del costo total. En Suiza, Gessner y col.,(27) en 1993, estimaron que los costos directos por cada paciente eran de 9 400 dólares y los indirectos a 5 130 dólares. Begley y col.,(28) en EE. UU. realizaron uno de los pocos estudios de costo incidencia en epilepsia en 1990 hasta su curación o fallecimiento, el costo de la incidencia de la epilepsia de todas personas diagnosticadas en EE. UU. durante 1990 se estimó en 3 mil millones de dólares, el 63% del costo total estaba asociado a los costos indirectos secundarios a la mortalidad prematura y en la epilepsia refractaria los costos directos generados por el tratamiento antiepiléptico representó más del 50% del costo total. Cockerell y col.,(29) en Inglaterra, en 1 600 pacientes, comparó los costos directos e indirectos en dos poblaciones de epilepsia, una incidente y otra prevalente. En los casos incidentes, el costo directo por paciente durante el primer año de enfermedad fue de 917 dólares, disminuyendo a los 8 años de seguimiento a 254 dólares por paciente/año. Murray y col.,(30) en 1994 en EE. UU., analizaron el costo de los pacientes adultos con epilepsia refractaria, indicando que el costo de la incidencia de la epilepsia se aproxima a los 318 millones de dólares, mientras que el costo anual de la prevalencia supera los 3 905 millones de dólares, representando los costos médicos directos la tercera parte del costo total. Berto y col.,(31) en 1996, concluyeron que los costos directos representaban el 88% del costo total y estaban influidos por la edad, el síndrome epiléptico y la forma de tratamiento en cada institución de Italia; quienes sugieren la necesidad de aplicar intervenciones preventivas y terapéuticas adecuadas en los primeros años de la evolución de la enfermedad epiléptica, sobre todo en la infancia con el fin de disminuir el sentimiento de estigma, reducir la morbilidad asociada y conseguir una integración laboral optima en la edad adulta. El cálculo de los costos, se clasifican en(32): – Costos directos. Se refieren a los que surgen en relación directa con una enfermedad y su tratamiento. Existen los costos médicos directos, tales como pagos por consultas ambulatorias, medicamentos, admisiones en los hospitales o exámenes. Se consideran también los costos que no son médicos, como los pagos por transporte, alojamiento, comida, etc. – Costos indirectos o de productividad. Se refieren a los efectos en el paciente o su familia de la enfermedad y su tratamiento, en el tiempo y con relación a la productividad laboral. Se consideran entre éstos, permisos o absentismo laboral, desempleo, mortalidad precoz, etc. – Costos intangibles. Se refieren al valor económico del dolor y sufrimiento debido a la enfermedad del individuo o su entorno próximo. Son difíciles de medir, razón por lo que lleva su nombre. En las epilepsias estos costes deben ser significativos, ya que las acompaña una gran estigmatización, siendo complicados de calcular(33,34). Objetivos Objetivo general –Evaluar los costos directos del diagnóstico y el tratamiento de la epilepsia de una población de pacientes pertenecientes a la Seguridad Social de Lima, Perú (Essalud), durante el 2006. Objetivos específicos – Determinar las características generales de la población. – Determinar cuál es el mayor costo directo de esta población. – Señalar en qué grupo de pacientes con epilepsia son los el que tiene más costos directos. –Comparar dichos costes directos con otros resultados internacionales. MATERIAL Y MÉTODOS Se realizó un estudio de tipo retrospectivo y analítico en 462 pacientes con diagnóstico de epilepsia, que asistieron a la consulta externa o fueron hospitalizados en el Hospital II Miguel Grau, Essalud, durante el año 2006; los pacientes son residentes del ámbito de los distritos de Lima Cercado y La Victoria que correspondan a la zona de adscripción del Hospital II Grau o fueron referidos de los distritos correspondientes a la Red Asistencial Almenara de Lima Metropolitana. El muestreo fue de tipo no probabilístico, la información clínica de los pacientes fue recolectado mediante un cuestionario estructurado de las historias clínicas. En cada uno de los grupos se revisaron: edad, sexo, tipo de crisis según la clasificación internacional de convulsiones epilépticas(35). Rev Per Neurol 2009 Vol 11 7 Costo médico directo de la epilepsia en una población hospitalaria de Lima, Perú Las consultas médicas, hospitalización, exámenes auxiliares (TAC, EEG) de laboratorio y medicamentos utilizados se les hallo el cálculo del valor económico del tarifarlo de atención al público no asegurado de Essalud, considerando en todos ellos el valor de venta que viene a ser el precio de venta menos el 19% de IGV (impuesto general a la venta). (Ver Tabla 1) En el presente estudio no se ha considerado el estudio de RMN cerebral, por no contar nuestro hospital un convenio directo con instituciones o empresas que realicen dicho examen, siendo derivados los pacientes a un hospital referencial de Essalud para completar dicho estudio, de acuerdo al caso. Los precios de los fármacos antiepilépticos (FAE) todos genéricos, fueron tomados de la lista de precios del Servicio de Farmacia de Essalud y que constituyen los valores más bajos del mercado nacional. Para el análisis estadístico se utilizo el paquete estadístico SPSS 12,0 siendo este de tipo descriptivo y analítico utilizando la prueba de ji cuadrado para las variables categóricas y la prueba de t Student para las variables numéricas. Para el estudio los pacientes se subdividieron en dos grupos: modificada de T. Mesa y col.,(38). –Epilepsia controlada/activa. Contiene a la epilepsia en remisión: pacientes con control completo de crisis por más de un año al momento de comenzar el estudio. Tabla 1. Tarifario de costos directos en Essalud. Costos directos (S/.) Precio de venta (VV + IGV) • Consulta especialista Valor de venta (VV) Epilepsia con crisis ocasionales: pacientes con crisis aisladas y que no necesitan modificación del tratamiento. Epilepsia activa sin resistencia farmacológica: pacientes con crisis recurrentes que requieren cambios farmacológicos en su tratamiento y con posibilidades de tener respuesta a ellos. – Epilepsia refractaria. Pacientes con crisis recurrentes, con buen uso de dos o más FAE y por más de 6 meses cada uno, que a criterio médico no responderá a nuevos medicamentos. Criterios de inclusión y exclusión Criterios de inclusión – Pacientes con diagnóstico de epilepsia controlada, activa o refractaria. – Pacientes niños con epilepsia no provocada que asistieron a la consulta externa o fueron hospitalizados. Criterios de exclusión – Pacientes con crisis única durante el año de estudio. – Pacientes epilépticos hospitalizados por causas no relacionadas a la epilepsia, complicación o estudios de la misma. RESULTADOS Se estudiaron 462 pacientes 247 varones (53,5%), con un promedio de edad de 40,7 años DE + 22,03, (LI: 1 – LS: 92 años), siendo el grupo de 31 a 45 años el más prevalente (22,1%). Figura 1. El 82,3% de las epilepsias fueron de tipo controladas/ activas y el 17,7% de tipo refractario. El 94,4% de las consultas (2 699) correspondieron a neurología y el resto a otras especialidades como: medicina, pediatría, psi- 35,70 30 • Hospitalización 186,83 157 • TAC cerebral c/c 312,97 263 • EEG 110,67 93 • Dosaje sérico: – Carbamazepina – Fenitoina – Fenobarbital – Ácido valproico 32,13 17,85 17,85 34,51 27 15 15 29 • Hemograma 23,80 20 • Glucosa 13,09 11 • Urea 13,09 11 • Creatinina 13,09 11 • TGO 15,47 13 5 • TGP 15,47 13 • Fosfatasa alcalina 26,18 22 0 • Examen orina completo 11,90 10 IGV = impuesto general a las ventas (19%). 1 dólar = 3,32 nuevos soles (S/.) 8 Rev Per Neurol 2009 Vol 11 25 Porcentaje 20 22,1 17,7 19,7 18,4 16,2 15 10 5,8 < 15 16-30 31-45 46-60 61-75 Años Figura 1. Frecuencia de epilepsia por grupo etario. > 76 P Pérez-Galdos Tabla 2. Características por grupo etario, consultas y hospitalización por tipo de epilepsia 18,75% 47,19% Epilepsia controladaEpilepsia refractariaTotal • Pacientes 380 82 462 • Edad 21,56% 12,50% TAC cerebral EEG Dosaje FAE Otros Figura 2. Frecuencia porcentual de exámenes auxiliares. – < 15 años 73 9 82 – 16-30 años 72 13 85 – 31-45 años 72 30 102 – 46-60 años 79 12 91 – 61-75 años 61 14 75 – > 76 años • Consultas quiatría, infectología, emergencia y otras; el promedio de consulta especializada por paciente al año fue de: 6,26 consultas DE + 3,16 (LI: 1 – LS: 16). El 9,1% de los pacientes (42) estuvieron hospitalizados, todos ingresaron por crisis epilépticas o status convulsivo; el promedio de días de hospitalización fue de: 6,93 días DE + 4,72 (LI: 1 – LS: 29). De los 320 exámenes solicitados, 60 (18,75%) fueron TAC cerebral; 69 (21,56%), EEG; 40 (12,50%), dosajes séricos de FAE. El resto correspondió a otros exámenes, entre hematológicos, bioquímicos, orina y LCR. Figura 2. De los medicamentos anticonvulsivantes prescriptos durante el 2006, el 27,79% correspondió a fenitoína, seguido de carbamazepina en un 24,3% y ácido valproico con 19,72%. Figura 3. Al analizar las características clínicas, consultas y hospitalización de los pacientes con epilepsia controlada (380) y refractaria (82), se observó que el mayor número de pacientes con epilepsia refractaria se encuentran en el grupo de 31 a 45 20,00 15,00 10,41 10,00 6,16 5,00 0,00 8,88 2,72 AV LMT GBP FB FT CNZ Fármacos antiepilépticos AV = ácido valproico, LMT = lamotrigina, GBT = gabapentina, FB = fenobarbital, FT = fenitoína, CNZ = clonazepam, CBZ = carbamazepina. Figura 3. Frecuencia de prescripción de fármacos antiepilépticos en epilepsia. 17 42 151 291 Al realizar el cálculo de costos directos en forma general se tiene; que el costo farmacológico total de los FAE fue de S/. 80 902,03 (24 368,08 dólares) siendo el costo promedio por paciente/año de: S/. 175,11 (52,74 dólares); el mayor costo anual por medicamento anticonvulsivante fue para el ácido valproico (47,8%), seguido de lamotrigina (21,8%) y fenitoína (15,7%) (Figura 4). 47,87 40 30 21,77 20 15,68 10 CBZ 25 140 años, en comparación a la epilepsia controlada/ activa que se encuentran en el grupo de 46 a 60 años (p < 0,016), el promedio de consultas de los pacientes con epilepsia controlada/activa fue de: 5,86 menor que los pacientes con epilepsia refractaria de: 7,74 (p < 0,004), el promedio de hospitalización de los pacientes con epilepsia refractaria fue tres veces mayor que los pacientes con epilepsia controlada/activa (p < 0,0001), pero sin embargo los días de hospitalización en ambos grupos no variaron significativamente. Tabla 2. 24,30 19,72 27 2 860 • Días de hospitalización Porcentaje Porcentaje 25,00 4 635 • Hospitalizacion 50 27,79 30,00 23 2 225 0 AV LMT 6,73 3,20 1,57 GBT FB FT Fármacos antiepilépticos CNZ 3,18 CBZ AV = ácido valproico, LMT = lamotrigina, GBT = gabapentina, FB = fenobarbital, FT = fenitoína, CNZ = clonazepam, CBZ = carbamazepina. Figura 4. Costo porcentual anual de los fármacos antiepilépticos Rev Per Neurol 2009 Vol 11 9 Costo médico directo de la epilepsia en una población hospitalaria de Lima, Perú Tabla 3. Costo medico directo por tipo de epilepsia Costos directos (S/.) Epilepsia controlada % Epilepsia refractaria % Total % • Farmacológico 43 288,41 28,95 37 613,62 42,91 80 902,03 34,11 • Consulta 66 750,18 44,65 19 050,00 21,73 85 800,18 36,18 • Hospitalización 21 980,00 14,70 23 707,00 27,05 45 687,00 19,26 • Exámenes auxiliares 15 115,00 10,11 5 013,00 5,72 20 128,00 8,49 • Laboratorio Total 2 369,17 1,58 2 271,99 2,59 4641,16 1,96 149 502,76 100,00 87 655,61 100,00 237 158,37 100,00 El costo total por consulta especializada fue de S/. 85 800,18 (25 843,43 dólares) y el costo promedio por paciente/año fue de S/. 185,71 (55,94 dólares); el costo total por hospitalización fue de: S/. 45 687,00 (13 761,14 dólares) y el costo promedio por paciente hospitalizado/ año fue de: S/. 1 087,78 (327,64 dólares), el costo total de exámenes auxiliares (TAC y EEG) fue de: S/. 20 128,00 (6 062,65 dólares) y el de laboratorio de: S/. 4 641,16 (1 397,94 dólares); el costo directo total fue de S/. 237 158,37 (71 433,24 dólares), el costo directo promedio durante el 2006 fue de S/. 513,3 (154,61 dólares). El mayor porcentaje de los costos directos correspondieron a: la consulta especializada en un 36,2%, seguido por la medicación anticonvulsivante en un 34,1% y los costos de hospitalización en un 19,2% ( Tabla 3). El costo directo anual de los pacientes con epilepsia controlada (N = 380) fue de: S/. 149 502,76 (45 030,95 dólares), y el costo promedio por paciente/año de: S/. 393,43 (118,50 dólares); el costo directo de los pacientes con epilepsia refractaria (N = 82) fue de S/. 87 655,95 (26 402,29 dólares) y el costo promedio por paciente/año, S/. 1 068,97 (321,97 dólares), al desagregar los costos directos se obtiene: el costo promedio anual farmacológico de los pacientes con epilepsia refractaria fue de S/. 458,7 (138,16 dólares) cuatro veces mayor que el de la epilepsia controlada / activa (p < 0,0001), el costo promedio de la consulta externa de la epilepsia refractaria fue de: S/. 276,45 (83.27 dólares) mayor que la epilepsia controlada / activa (p < 0,0001), no se encontró una diferencia significativa en ambos tipos de epilepsia en relación a los costos de hospitalización (p = 0,06). DISCUSIÓN En el Perú, los costos directos de la epilepsia en la Seguridad Social (Essalud), son asumidos completamente por la institución, lo que significa un alivio económico importante para este sector de la población. En nuestro medio no existen estudios de este tipo en la población asegurada 10 Rev Per Neurol 2009 Vol 11 y no asegurada, a pesar que son importantes para la planificación y reorientación de los gastos de las prestaciones de salud en Essalud. A pesar de no tener una tendencia estadísticamente significativa en lo que se refiere a la frecuencia de presentación de la enfermedad por género, sí se observó un ligero predominio del sexo masculino (53,5%); los que coinciden con la literatura(21,37,38); el promedio de edad fue de 40,7 años, mayor que en la India y Omán que fueron de 22,6 y 28 años, respectivamente(39,41), es de remarcar que en la población asegurada, la enfermedad ha presentado un cambio en su presentación por grupo etario, en comparación al año de 1999, en el que existía un predominio en el grupo menor de 20 años(37), probablemente debido al aumento de edad de los pacientes epilépticos crónicos, continuadores al servicio hospitalario y al incremento de la expectativa de vida de estos. La presentación de los pacientes con epilepsia refractario fue superior al estudio realizado en Hong Kong(42), de igual forma el promedio de consultas anuales también fue mayor que en la India y Omán(39,41), en este caso debido a la mayor accesibilidad y la cobertura al integro del costo de la consulta especializada por la Seguridad Social en el Perú; la gran mayoría de las consultas ambulatorias fueron hechas por neurólogos, comparable a los resultados de los estudios regionales e internacionales(38,41), lo que expresaría la suficiente asistencia especializada, disminuyendo los sesgos de diagnóstico y tratamiento no racional por médicos no especialistas. El porcentaje de pacientes hospitalizados fue inferior a otros estudios(38,39,41), la menor estancia hospitalaria (7 días) probablemente se deba a un mayor índice de rotación de camas existente en nuestro medio, por una política institucional del alta precoz. Los exámenes auxiliares solicitados en su mayoría fueron estudios de laboratorio (hemogramas, exámenes bioquímicos, orina, etc.) seguidos de estudios de imágenes (TAC cerebral), neurofisiológicos (EEG), y dosajes de FAE, la menor cantidad de exámenes de EEG y dosajes séricos de P Pérez-Galdos los FAE en comparación a otros estudios(38,41), es por que los exámenes se realizan en forma centralizada en el hospital de referencia de IV nivel en Essalud, cuyos trámites de traslado son burocráticos, produciendo malestar y en algunos casos la pérdida de la oportunidad de los exámenes de los pacientes. Los medicamentos anticonvulsivantes más prescriptos fueron fenitoína, carbamazepina, ácido valproico y fenobarbital, este orden coincide con el de la prescripción de los FAE al estudio de SV Thomas y col.(39), mas no con el estudio de Ibrahim Al-zakwani y col.(41), en los que predominan medicamentos de alto costo como el ácido valproico y lamotrigina. Dentro de los FAE de segunda línea: la lamotrigina fue el más utilizado, asociado a otros FAE para el control de pacientes con epilepsia refractaria(43). El ácido valproico y lamotrigina son los medicamentos más costosos en el presente estudio en contraste a la fenitoína y carbamazepina que son los menos costosos pero los más utilizados, similar a otros estudios(40). Así mismo se puede inferir que tanto la carbamazepina, la fenitoína y el ácido valproico, demostraron ser los fármacos con mayor costo -efectividad en el control de las crisis parciales y generalizadas, comparable a un estudio realizado en el Reino Unido(44). A pesar de la cobertura completa del tratamiento farmacológico de la epilepsia por la Seguridad Social existe un porcentaje de pacientes que descontinúan el tratamiento por diversos factores como: un pobre conocimiento del problema, finalización del Seguro en caso de pacientes hijos (derechohabientes) que cumplen mayoría de edad (18 años), desempleo fortuito, pensamientos mágicos, frustración, abandono familiar, discapacidad mental y ocasionalmente carencia de FAE, resultando en recurrencia de crisis(45). El costo médico directo promedio anual de nuestra población de pacientes epilépticos fue de 154,61 dólares, muy inferior a otros estudios(22-25,31,41) y solamente superior al estudio Hindú(39), los costos de la consulta especializada conjuntamente a los FAE y hospitalización representaron los principales costos directos del total de pacientes epilépticos, contrario a lo sucedido en los estudios de Omán e Italia, en los que los costos de hospitalización y de FAE son los mayores.(31,41) Los costos promedios anuales de hospitalización, farmacológico y consulta especializada de la epilepsia refractaria fueron de S/. 1 659,49 (499,84 dólares), 458,7 (138,16 dólares) y 276, 45 (83,26 dólares), respectivamente y los mismos costos promedios anuales de la epilepsia controlada/activa fueron de S/. 1 046,24 (315,13 dólares), 113,91(34,31 dólares) y 209,03 (62,96 dólares), respectivamente, observado una reducción significativa hasta 4 veces del costo farmacológico de la epilepsia controlada/ activa en relación a la refractaria; comparando los costos de hospitalización de la epilepsia refractaria y controlada/ activa son mayores que sus pares en el estudio de Omán(41); debido probablemente al mayor costo por día de hospitalización en nuestro medio, considerando un promedio de días de hospitalización similar en ambos estudios. El costo farmacológico promedio paciente/año fue de S/. 175,11 (52,74 dólares), semejante al costo obtenido en el estudio de la India(39) pero muy inferior a otros estudios internacionales(31,38,41,42,46). Los estudios farmacoepidemiológicos son una herramienta eficaz, fácil y de bajo coste para estimar la prevalencia de la epilepsia. Además, permiten conocer los fármacos más utilizados y contribuir a un uso más racional(47). El presente estudio no consideró los costos indirectos ni intangibles inherentes a la epilepsia, por que su cálculo objetivo es muy complicado en nuestro medio, pero se presume que deben de ser altos para el paciente, además de incrementar los costos económicos y sociales de su familia, quienes reducen sus actividades sociales y productivas, llevándoles a dificultades financieras y a la sociedad en su conjunto.(48) REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS 1. Cruz ALE, Vázquez CJL. Prevalencia de algunas enfermedades neurológicas en la Ciudad de Tepatitlán, Jalisco México. 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RESUMEN Presentamos nuestra experiencia en los primeros 8 pacientes con enfermedad vascular cerebral isquémica aguda tratados con trombólisis, mediante el uso de factor activador de plasminógeno tisular recombinante –rtPA (alteplasa). Los pacientes que ingresan al Servicio de Emergencia, son inicialmente estabilizados en la Unidad de Trauma Shock, para luego pasar al ambiente de la Unidad de Enfermedad Vascular Cerebral del Servicio de Neurología. Hacemos una revisión del perfil neurovascular de los pacientes y el territorio vascular afectado, que en todos los casos fue el carotídeo, siete en forma parcial y uno completo. Se discute los resultados a la luz de los nuevos conceptos del tratamiento de este tipo de patología vascular cerebral. Palabras clave: Alteplasa. Enfermedad vascular cerebral isquémica. Isquemia carotídea. Trombólisis. ABSTRACT We present our experience in the first 8 patients with ischemic stroke treated with trombolysis, by means of the recombinant tissular plasminogen factor - rtPA (alteplase). The patients enter to the Service of Emergency, initially are stabilized in the Unit of Trauma Shock, then they are derived to the Unit of Cerebral Vascular Disease of the Service of Neurology. We make a revision of the profile neurovascular of the patients and the vascular territory affected, that in all the cases was the carotid one, 7 in partial form and 1 complete one. One discusses the results to the light of the new concepts of the treatment of this type of cerebral vascular pathology. Keywords: Alteplase. Carotid ischemia. Carotid trombolysis. Ischemic stroke. INTRODUCCIÓN La enfermedad cerebral vascular (EVC) es la tercera causa de muerte después del infarto de miocardio y cáncer, y es la que más lleva a incapacidad permanente en los diferentes países del mundo. La obstrucción de un vaso sanguíneo cerebral ocasiona un gradiente isquémico que da lugar a lesión intensa en el centro del territorio cerebral vascular y a isquemia menos pronunciada en la periferia del mismo, lo que se ha denominado ‘núcleo y penumbra’(1-4). Si el flujo sanguíneo no es restaurado la necrosis y el infarto ocurren rápidamente en una onda que va del centro de la lesión hacia la periferia a través de la Servicio de Neurología, Hospital Nacional Guillermo Almenara Irigoyen. Essalud. Lima, Perú. zona de penumbra(5). Las células del núcleo isquémico con un flujo inferior al umbral del infarto mueren en unos pocos minutos y en la zona periférica se originan alteraciones de la actividad funcional de las neuronas con conservación de una actividad metabólica mínima que preserva su integridad estructural durante algún tiempo(6-8). Los estudios experimentales demuestran que cuanto menor es la duración del episodio isquémico menor es la extensión de la lesión cerebral, y cuanto antes se produzca la recanalización del vaso afectado menor es el déficit neurológico(3). Este tiempo denominado ‘ventana terapéutica’ nos ofrece la posibilidad de poder restaurar el flujo sanguíneo lo más pronto posible. Basados en este concepto la revascularización se convierte en una nueva opción terapéutica, por lo que se han ensayado una serie de agentes antitrombóticos, trombolíticos y neuroprotectores. Rev Per Neurol 2009 Vol 11 13 Terapia trombolítica en un hospital nacional La finalidad de la terapia trombolítica es limitar el tamaño del infarto, producir la disolución del coágulo y restaurar el flujo sanguíneo en el tejido isquémico. La Food and Drug Administration (FDA) aprobó, en junio de 1996, el uso endovenoso del factor activador de plasminógeno tisular recombinante (rtPA) para el tratamiento de pacientes con enfermedad cerebral vascular isquémica aguda, de menos de tres horas de evolución. Con las dosis recomendadas dentro del tiempo propuesto se observa un mejor pronóstico clínico al cabo de tres meses del evento(9). La experiencia en nuestro país en terapia trombolítica es escasa, sin embargo consideramos que es un importante método en el tratamiento de la enfermedad vascular isquémica en fase aguda y su empleo en pacientes debidamente seleccionados disminuye la mortalidad y reduce los gastos hospitalarios, mejorando también la consecuente situación económica del paciente y la dependencia familiar. El presente trabajo tiene el objetivo de dar a conocer nuestros resultados con el uso de rtPA, en pacientes con EVC isquémica que han sido tratados con alteplasa en el Servicio de Neurología del Hospital Nacional Guillermo Almenara Irigoyen (HNGAI). Se realizó un análisis desde el momento del inicio del evento hasta su seguimiento dentro de los tres meses posteriores. MATERIAL Y MÉTODOS Nuestra experiencia con el factor activador de plasminógeno tisular recombinante (alteplasa) en el Servicio de Neurología del HNGAI, se inicia en el mes de diciembre de 2003, siguiendo las bases establecidas en el Protocolo validado. Desde esa fecha hasta el mes de abril de 2006 hemos tratado 8 casos con trombólisis. El procedimiento se ha realizado en el HNGAI, un centro hospitalario de IV nivel, en el que se atienden pacientes con alto grado de complejidad. Los pacientes ingresan al Servicio de Emergencia, en la Unidad de Trauma Shock se inician las medidas orientadas al mantenimiento de las funciones vitales y la vía aérea, para luego pasar a los cuidados de la Unidad de Enfermedades Cerebrovasculares. A continuación se describe la dinámica de la realización del procedimiento. El paciente ingresa por emergencia y es evaluado por el neurólogo de guardia, quien asume el manejo del paciente. En forma inmediata se realiza la valoración según la Escala NIHSS (National Institutes of Health Stroke Scale), la misma que se vuelve a registrar cada 15´ durante la primera hora después del tratamiento, a las 24 horas, 7 días y 3 meses. Al momento del ingreso se realiza una tomografía axial computarizada cerebral, y se solicitan exámenes de laboratorio de base que incluyen recuento completo de células sanguíneas, tiempo de protrombina, tiempo de tromboplastina parcial, glucosa, urea y creatinina en suero, además 14 Rev Per Neurol 2009 Vol 11 Tabla 1. Características demográficas y clínicas Paciente Edad Sexo NIHSS Presión (años) basal sanguínea (mmHg) Territorio Afectación afectado de la ACM en TAC • 1 83 M 160/80 Carotídeo Parcial • 2 73 M 7 180/100 Carotídeo Parcial • 3 60 M 15 140/80 Carotídeo Parcial • 4 48 F 10 120/80 Carotídeo Parcial • 5 69 M 7 130/70 Carotídeo Parcial • 6 57 F 7 120/40 Carotídeo Parcial • 7 79 M 6 140/90 Carotídeo Parcial • 8 75 F 15 140/70 Carotídeo Total 4 NIHSS: National Institutes of Health Stroke Scale Score ACM: arteria cerebral media TAC: tomografía cerebral de la realización de una radiografía de tórax. La decisión de realizar el tratamiento la adopta el neurólogo de guardia con el equipo de EVC, contando con el consentimiento informado del paciente o el familiar responsable. La administración del medicamento se inicia luego de excluir que la tomografía muestre signos precoces de infarto y descarte lesión hemorrágica, completándose el estudio con exámenes sanguíneos. Se administra alteplasa a una dosis de 0,9 mg/kg (dosis máxima 90 mg), 10% de la dosis total se administra en bolo durante un minuto y el resto de la dosis en infusión continua durante una hora, con monitoreo clínico constante del paciente, protocolo establecido desde la primera trombólisis realizada(10). RESULTADOS De diciembre de 2003 a abril de 2006 se ha tratado un total de 8 pacientes, 5 varones y 3 mujeres, con una edad promedio de 68 años( 48-83 años). La Tabla 1 muestra las principales características demográficas y clínicas. Tabla 2. Principales factores de riesgo para enfermedad cerebrovascular Total n=8 % • Hipertensión arterial 5 62,5 • Dislipidemia 3 37,5 • Diabetes 2 25,0 • Cardiopatía (valvulopatía, bypass) 2 25,0 • Fumador 1 12,5 • EVC anterior 1 12,5 M Quiñones, E Bujaico, C Castañeda, J Vera Tabla 3. Datos de laboratorio Casos 1 2 3 4 5 6 7 8 6,2 8,5 6,6 5,9 9,5 5,5 11,3 9,8 – Hemoglobina (g/dL) 12,6 12,0 15,3 9,9 15,0 6,0 12,2 11,9 – Hematocrito (%) 36,1 35,2 44,6 29,1 45,6 18,8 35,2 36,8 – Plaquetas/mm3 171,0 346,0 – – 230,1 330,0 342,0 – • Recuento sanguíneo completo – Leucocitos/mm3 • Parámetros de coagulación – Tpt (s) 31,6 33,3 35,5 31,2 29,1 30,5 31,2 29,5 – TP (s) 10,8 10,5 11,0 10,6 10,3 11,2 11,0 10,5 0,9 1,0 1,0 1,0 0,90 1,1 1,2 1,0 5,6 6,9 15,2 4,8 5,2 5,1 6,7 7,9 – INR • Bioquímica – Glucosa (mmol/L) – Urea (mmol/L) – Creatinina (mmol/L) 5,9 7,6 3,7 2,8 8,8 3,5 8,7 12 92,0 162,0 110,0 80,0 78,0 60,0 77,0 116 La Tabla 2 presenta los principales factores de riesgo para enfermedad cerebral vascular. Se observa que la hipertensión arterial fue el factor de riesgo más frecuente, con un 62,5%, seguido por la dislipidemia, con 37,5%; diabetes mellitus, 25% y cardiopatía, 25%. La Tabla 3 muestra los principales estudios complementarios de laboratorio: exámenes sanguíneos y bioquímicos y parámetros de coagulación realizados a los ocho pacientes. La Tabla 4 presenta las medianas de diversos tiempos transcurridos para la atención. El tiempo de demora de la llegada del paciente desde el inicio de los síntomas al Servicio de Emergencia tuvo una mediana de 94 minutos (40-150); la mediana del tiempo transcurrido desde la puerta al tratamiento fue 110 minutos (50-147) y el total de tiempo transcurrido desde que se presentaron los síntomas hasta la administración del tratamiento, una mediana de 197 minutos (170-225). Tabla 4. Evaluación de los tiempos de demora valorado en minutos y evolución y seguimiento con escala de NIHSS a los 3 meses Relación de pacientes 1 2 3 4 5 6 7 8 • Inicio-puerta 110 78 60 60 120 150 40 121 • Puerta-tratamiento (mediana = 110) 100 147 120 120 50 50 170 71 • Inicio-tratamiento (mediana = 197) 210 225 180 180 170 200 210 192 • NIHSS basal (mediana = 7) 4 7 15 10 7 7 6 15 • NIHSS/ hora 3 4 13 10 4 6 6 14 • NIHSS 24 horas 9 2 13 7 2 2 3 15 • NIHSS 7 días 3 2 11 5 – 1 2NE • NIHSS 3 meses 0 1 6 0 2 0 a * Hiperglicemia HipotensiónNoNoNo ** • Complicaciones THNo NIHSS: National Institutes of Health Stroke Scale Score TH: transformación hemorrágica NE: no evaluable ** Con prótesis valvular aórtica y plastia de válvula mitral. Fibrilación auricular, falla renal crónica reagudizada. Sepsis; insuficiencia respiratoria –: no se registra Rev Per Neurol 2009 Vol 11 15 Terapia trombolítica en un hospital nacional Tabla 4. Evaluación de los tiempos de demora valorado en minutos y evolución y seguimiento con escala de NIHSS a los 3 meses Relación de pacientes 1 2 3 4 5 6 7 8 • Inicio-puerta 110 78 60 60 120 150 40 121 • Puerta-tratamiento (mediana = 110) 100 147 120 120 50 50 170 71 • Inicio-tratamiento (mediana = 197) 210 225 180 180 170 200 210 192 • NIHSS basal (mediana = 7) 4 7 15 10 7 7 6 15 • NIHSS/ hora 3 4 13 10 4 6 6 14 • NIHSS 24 horas 9 2 13 7 2 2 3 15 • NIHSS 7 días 3 2 11 5 – 1 2NE 0 1 6 0 2 0 a * Hiperglicemia HipotensiónNoNoNo ** • NIHSS 3 meses • Complicaciones THNo NIHSS: National Institutes of Health Stroke Scale Score TH: transformación hemorrágica NE: no evaluable ** Con prótesis valvular aórtica y plastia de válvula mitral. Fibrilación auricular, falla renal crónica reagudizada. Sepsis; insuficiencia respiratoria –: no se registra DISCUSIÓN El tratamiento actual de las enfermedades cerebrovasculares abre la posibilidad de utilizar modernas técnicas diagnósticas y terapéuticas destinadas a un tratamiento agudo y precoz de los accidentes vasculares cerebrales isquémicos. El manejo inicial del paciente en fase aguda cobra mucha importancia a nivel mundial porque es lo que más repercute en forma directa en la sobrevida y el estado funcional posterior, lo que requiere todo el esfuerzo necesario a fin de brindar las medidas suficientes para A mejorar la calidad de vida. Sin embargo para una exitosa intervención del paciente con EVC aguda se requiere un manejo protocolizado en unidades de enfermedad vascular cerebral aguda, lo que queda demostrado mediante diversos estudios publicados que demuestran los inmensos beneficios a favor del paciente(11-13). Las unidades de Enfermedad Vascular Cerebral han mostrado ser un medio eficaz, ya que la mortalidad al ingreso (con independencia de la edad, comorbilidad, y extensión del déficit motor), la estancia media, la necesidad de insti- B Caso 1. Paciente LCP, 83 años, hipertensa, llegó al hospital a los 90 minutos, NIHSS = 5, trombólisis a los 180 minutos. A) TAC a su llegada al hospital. B) TAC a los 7 días, NIHSS = 0. 16 Rev Per Neurol 2009 Vol 11 M Quiñones, E Bujaico, C Castañeda, J Vera tucionalización, son significativamente menores que en la sala de pacientes de Neurología. Disminuyen el riesgo de discapacidad con un mejor estado en la recuperación funcional al alta, con aumento de los pacientes independientes. Por otra parte, se han publicado varios estudios que demuestran que la atención neurológica precoz en el ictus se relacionó a un mejor pronóstico funcional, y un acortamiento de la hospitalización(14-16). A La trombólisis intravenosa con rTPA mejora los resultados de los pacientes tratados con EVC isquémico, su eficacia ha sido demostrada a pesar de un incremento de riesgo de transformación hemorrágica, como se señalan en estudios en los que se indica que si bien es cierto el incremento de riesgo absoluto de hemorragia cerebral en tratados con rtPA es 6%, hay una reducción del riesgo absoluto de la mortalidad del 4% a los 3 meses comparado con placebo(17,18). Como se puede ver en los resultados la mayoría de los pacientes mejoró su NIHSS a los 3 meses. En el caso 3, con un NIHSS en incremento (en el momento del ingreso del paciente estaba en 10 y posterior a la trombólisis en 15), la respuesta no fue del todo buena por la hiperglicemia sostenida del paciente. Los demás pacientes, exceptuando el caso 8, tuvieron excelente respuesta con un NIHSS de 2 como máximo a los 3 meses. B El período de hospitalización en la Unidad de EVC fue de 3 a 5 días, solo los casos 1 y 8, que excedió los 10 días. Con excepción del caso 4, todos se reintegraron a su labor o actividad diaria en menos de 3 meses, este efecto se vio mejor en los casos 5 y 6 que estuvieron hospitalizados por 3 y 4 días reintegrándose a su trabajo en menos de 30 días. Nosotros tenemos una mediana de 197 minutos desde el inicio de la enfermedad hasta la aplicación de la medicación, que excede al tiempo en el protocolo inicial (menor a 180 minutos), pero una serie de trabajos recientes han extendido el tiempo de ventana terapéutica hasta las 4,5 horas. En nuestra casuística ningún paciente inició el tratamiento con más de 4 horas, y sólo se ha excedido en el tiempo sugerido en un máximo de 35 minutos, lo que no ha alterado la respuesta final del NIHSS. En comparación con los hallazgos internacionales y en relación al trabajo inicial NINDS (1995) no hemos encontrado mayor diferencia en cuanto a los resultados y la evolución de los pacientes, destacamos la necesidad de realizar una buena elección del paciente y un correcto cumplimiento del protocolo en una Unidad de EVC. C Caso 2. Paciente GLA, 57 años, hipertensa y diabética, llegó al hospital a los 100 minutos del evento, NIHSS = 11. A) TAC a su llegada al hospital, a los 100 minutos del evento. B) TAC a los 7 días: infarto subcortical. C) TAC a los 3 meses, NIHSS = 0 Rev Per Neurol 2009 Vol 11 17 Terapia trombolítica en un hospital nacional En nuestra casuística tuvimos un solo caso de hemorrágica intracerebral, pero la hemorragia que fue muy pequeña se presentó luego del tiempo máximo de espera para la posibilidad de hemorragia postrombólisis que es de 36 horas, no considerado como una complicación sino como evento accidental. CONCLUSIONES Luego de realizar un análisis global, consideramos que por los resultados internacionales y por lo hallazgos propios, el uso del rTPA en la enfermedad cerebrovascular isquémica en fase aguda en pacientes debidamente seleccionados, es una alternativa de tratamiento, que disminuye la mortalidad y la morbilidad, traduciéndose en términos de estancia hospitalaria, las consultas posteriores y el gran costo-beneficio para la institución, sin contar el beneficio al paciente que se puede reintegrar a sus actividades diarias con normalidad. REFERENCIAS bibliográficas A B Caso 3. Paciente ART, 55 años, mujer, hipertensa, diabética, EVC lacunar anterior, llegó al hospital con 60 minutos de EVC, NIHSS = 12, trombólisis a los 120 minutos. A) TAC a su llegada al hospital. B) TAC a los 7 días. NIHSS: 6. En el presente trabajo, no hemos tenido pacientes fallecidos ni trasformación hemorrágica, lo que creemos está más en relación a los pocos casos que tenemos a que sea una conducta de nuestra población. En todo caso, al incrementar la casuística veremos el comportamiento de esta. 18 Rev Per Neurol 2009 Vol 11 1. Weinstein PR, Hong S, Sharp FR. Molecular identification of the ischemic penumbra. Stroke 2004;35:2666-2670 2. Ginsberg MD: Adventures in the pathophysiology of brain ischemia Stroke. 2003; 34(1):214-23 3. Smith WS. Pathophysiology of focal cerebral ischemia: a therapeutic perspective. J Vasc Interv Radiol. 2004;5:S3-S12. 4.Kaufmann AM, Firlik AD, Fukui MB Wechsler LR, Jungries CA, Yonas H. Ischemic core and penumbra in human stroke. Stroke 1999;30:93-99. 5. Castillo J. Fisiopatología de la isquemia cerebral. Rev Neurol. 2000;29: 459-454. 6. The World Health Organization. The World Health Report: Making a Difference. WHO. 1999.p.1-121. 7. Planas AM. 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En las fases iniciales de la enfermedad es, en general, leve y de inicio insidioso, aunque la variabilidad interindividual es amplia, dependiendo de las alteraciones anatomopatológicas predominantes en las lesiones. En los casos más graves, se puede incluir dentro del discutido término de demencia subcortical; pero, en cualquiera de los casos suele afectar atención, eficiencia del procesamiento de la información, función ejecutiva, velocidad del procesamiento y memoria de largo plazo. El diagnóstico debe ser realizado luego del descarte de alguna condición que interfiera con el desempeño cognitivo y tras una correcta evaluación neuropsicológica. Se ha demostrado el relativo impacto positivo que tienen la inmunoterapia y los inhibidores de colinesterasa. Palabras clave: Atrofia cerebral. Deterioro cognitivo. Demencia. Esclerosis múltiple. Tratamiento. ABSTRACT Long time the cognitive impairment in multiple sclerosis was considered minor compared to the consequences caused by motor and sensory deficit but now we know the impact of cognitive dysfunction in the quality of life of patients with multiple sclerosis. While the prevalence rate of dementia is low, some form of deterioration in cognitive function can occur in 40 to 70% of patients with multiple sclerosis. The pattern of cognitive impairment is not uniform. In the initial stages of the disease is generally mild and insidious onset, although variability is large, depending on the pathological changes in injuries. In severe cases, can be included within the discussed term subcortical dementia, but in all cases affect attention, efficiency of information processing, executive function, processing speed and long-term memory. The diagnosis must be made after discard some condition that interferes with the cognitive performance and after a correct neuropsychological assessment. Has demonstrated a slight positive impact with immunotherapy and cholinesterase inhibitors. Keywords: Cerebral atrophy. Cognitive impairment. Dementia. Multiple Sclerosis. Treatment. INTRODUCCIÓN La esclerosis múltiple (EM) es un desorden neuroinflamatorio y neurodegenerativo, caracterizado por la forma1.Unidad de Diagnóstico de Deterioro Cognitivo y Prevención de ción de placas desmielinizantes en la sustancia blanca del Demencia. Clínica Internacional. Lima, Perú. sistema nervioso central1. Las manifestaciones clínicas de 2.Unidad de Investigación. Clínica Internacional. Lima, Perú. EM van desde debilidad muscular, parestesias, o pérdida 3.Servicio de Neurología. Clínica Internacional. Lima, Perú. sensorial focal, hasta neuritis óptica, diplopía, ataxia y 4.Servicio de Neurología. Clínica Angloamericana. Lima, Perú. vértigo. Anormalidades motoras autonómicas de vejiga, 5.Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Mayor de intestino y función sexual son comunes. Otras manifes San Marcos. Lima, Perú Correspondencia: [email protected] taciones pueden incluir espasmos musculares dolorosos, Rev Per Neurol 2009 Vol 11 19 Deterioro cognitivo en pacientes con esclerosis múltiple neuralgia trigeminal, fatiga y depresión, convulsiones, disturbios psiquiátricos, y dificultades cognitivas sutiles. Las lesiones son usualmente evidenciadas en las imágenes por resonancia magnética (IRM) y las bandas oligoclonales de inmunoglobulinas en la electroforesis del líquido cefalorraquídeo (LCR)2. Los efectos del deterioro cognitivo sobre los aspectos sociales y ocupacionales son severamente subestimados, dado que la comunidad médica tiene la visión panorámica acerca de EM, como una enfermedad que causa deficiencias neurológicas motoras y sensoriales3. El deterioro cognitivo, sobre todo el leve, que aparece en las fases iniciales o formas benignas de la enfermedad, pasa inadvertido en muchas ocasiones, salvo que se busque específicamente, debido a varios factores4: el primero es que puede quedar enmascarado por las limitaciones derivadas de la incapacidad física y las alteraciones del estado animo; otro que la función del lenguaje permanece relativamente intacta, lo cual puede ser interpretado erróneamente como indicador de que las funciones superiores permanecen conservadas en general, y finalmente que el examen clínico rutinario del estado mental realizado a través del Minimental de Folstein (MMSE)5 subestima el deterioro cognitivo leve. Por otro lado, el primer paso en el manejo de pacientes con deterioro cognitivo, empieza con el descarte de otras condiciones que puedan interferir en el desempeño cognitivo, como depresión, fatiga y ansiedad. Sin embargo, separar los efectos de los desordenes afectivos y la fatiga del trastorno cognitivo primario es difícil frecuentemente6. Los medicamentos que contribuyen a trastorno cognitivo en pacientes con EM, especialmente aquellos que causan sedación o tienen efectos anticolinérgicos deben ser tomados en cuenta antes de establecer deterioro cognitivo primario7. Esta revisión va a estar enfocada en el reciente desarrollo de los conceptos relacionados al deterioro cognitivo de pacientes con EM en el campo de la epidemiología, patogénesis, la correcta evaluación clínica y sus oportunidades de tratamiento. EPIDEMIOLOGÍA DEL DETERIORO COGNITIVO EN ESCLEROSIS MÚLTIPLE El deterioro cognitivo ocurre en 40% a 70% de pacientes con una forma establecida de EM8-10. La disfunción cognitiva puede interferir con las interacciones sociales, las relaciones familiares y la capacidad para realizar tareas domésticas11. No obstante son pocos los pacientes que desarrollan demencia, los pacientes con algún grado de deterioro cognitivo tienen gran dificultad para conseguir y mantener un empleo. La disfunción cognitiva no correlaciona con compromiso físico y puede ocurrir en estadios 20 Rev Per Neurol 2009 Vol 11 tempranos de la enfermedad12. EM afecta varios aspectos del funcionamiento cognitivo incluyendo atención13, eficiencia del procesamiento de la información13,14, función ejecutiva15, velocidad del procesamiento14 y memoria de largo plazo16. La velocidad del procesamiento y el aprendizaje visual (memoria visual retrasada) son las habilidades cognitivas más comúnmente afectadas en EM (51,9% y 54,3%, respectivamente)9. La memoria de largo plazo está referida a la capacidad para aprender nueva información y recordarla en un punto determinado más adelante en el tiempo. La memoria de largo plazo es una de las funciones cognitivas más consistentemente comprometidas en EM y se observa en 40% a 65% de pacientes16. Los pacientes con EM requieren más repeticiones de la información para alcanzar un criterio de aprendizaje predeterminado, pero una vez que la información ha sido adquirida, el recuerdo y el reconocimiento son del mismo nivel, comparada con la alcanzada por los controles saludables17. Esta deficiencia en aprender nueva información resulta en habilidades disminuidas para la toma de decisiones. La eficiencia del procesamiento de la información está referida a la capacidad para mantener y manipular la información en el cerebro por un periodo corto de tiempo (memoria de trabajo) y la velocidad con la cual uno puede procesar la información (velocidad del procesamiento). Una reducción en la velocidad del procesamiento es el déficit cognitivo más común en EM14. Las pruebas que evalúan velocidad del procesamiento pueden ser usadas para predecir declinación cognitiva en el largo plazo18. Por otro lado, el desempeño en las tareas de atención está asociado con la velocidad de procesamiento y la memoria de trabajo. Sin embargo, las tareas de atención básica como repetición de dígitos no está afectada en pacientes con EM, mientras que el compromiso de la atención sostenida es muy común, sobre todo en las tareas de atención dividida, como tareas en la cual los pacientes son evaluados para atender varias tareas en simultáneo19. Las funciones ejecutivas están referidas a las habilidades cognitivas necesarias para conductas dirigidas a un objetivo y su adaptación a cambios ambientales o demanda. Esto incluye la capacidad de planificar y anticipar resultados. Las deficiencias en funciones ejecutivas (como razonamiento abstracto y conceptual, fluencia, planificación y organización) ocurren en pacientes con EM, pero son menos frecuentes que los trastornos de memoria y la eficiencia en el procesamiento de la información20. Drew y colaboradores notaron que 17% de pacientes con EM tuvieron dificultades en la evaluación de un rango de habilidades ejecutivas21. N Custodio, J Altamirano, R Montesinos, D Lira, J Escobar, H Torres Factores que afectan el desempeño cognitivo El efecto del deterioro cognitivo sobre Es importante tener en cuenta los factores que afectan el actividades de vida diaria desempeño cognitivo, como por ejemplo los factores relacionados a la enfermedad, depresión, fatiga y el compromiso de las funciones motoras orales; pues el diagnóstico de deterioro cognitivo puede ser sobredimensionado. Si bien es cierto, el deterioro cognitivo puede ser independiente de la duración de la enfermedad, y está sólo levemente asociada a la discapacidad física, el curso de la enfermedad si juega un rol importante en el patrón de deterioro cognitivo en EM. Así, EM progresiva generalmente resulta en compromiso cognitivo más severo que en EM remitente-recaída (EM-RR)22. En este punto, además es importante diferenciar curso de la enfermedad con tiempo de la enfermedad; pues si tenemos en cuenta que el 50% de individuos con EM-RR va a desarrollar EM secundariamente progresiva dentro de 10 a 15 años del inicio de la enfermedad, por definición la duración de la enfermedad y la extensión de la discapacidad neurológica va a ser mayor en pacientes con un curso secundariamente progresivo comparado con EM-RR. En estudios que han distinguido entre pacientes con EM primariamente progresivo y pacientes con EM secundariamente progresivo, significativamente mayor compromiso cognitivo fue observado en el grupo EM secundariamente progresivo18-23. Si tenemos en cuenta, que más del 60% de pacientes con EM tienen depresión, éste es un factor muy importante –si no el principal de todos– a descartar antes de establecer deterioro cognitivo primario. Arnett y colaboradores han demostrado una relación consistente entre depresión y funcionamiento cognitivo. La depresión afecta muchos aspectos del funcionamiento cognitivo, entre ellos memoria de trabajo, velocidad del procesamiento, funciones de aprendizaje y memoria, razonamiento abstracto y funciones ejecutivas24. El manejo de la depresión podría conducir a una mejoría en el funcionamiento cognitivo en pacientes con EM25. Fatiga es uno de los síntomas más comunes en EM y ha sido reportado en más del 90% de los pacientes con EM7. No obstante es difícil medir objetivamente la fatiga, en pacientes con fatiga se ha observado una disminución en el desempeño en tareas que requieren esfuerzo mental sostenido, sobre todo en tareas cognitivas que involucran memoria de trabajo y vigilancia visual26. Finalmente, dado que los pacientes con EM, pueden tener disartria y por lo tanto las tareas que requieren respuestas orales pueden ser difíciles para el paciente, debemos tener extremo cuidado en discernir este factor de confusión y evitar sobre-diagnóstico de deterioro cognitivo. No hay lugar a dudas de la cerrada relación entre disfunción cognitiva y estado funcional en EM. Se ha demostrado que individuos con EM y deterioro cognitivo tenían menos actividades sociales y vocacionales, tenían menos probabilidad de ser empleados, tenían gran dificultad en realizar tareas domésticas y fueron más vulnerables a enfermedades psiquiátricas, que los pacientes con EM y solo discapacidad física11. Si bien es cierto, el desempeño de las funciones ejecutivas no depende de la velocidad del procesamiento (recuerden que los pacientes pueden requerir más tiempo), se ha demostrado una sólida relación entre el desempeño de las funciones ejecutivas y la velocidad del procesamiento. Nagy y colaboradores27 han reportado que pacientes con EM tienen reducida capacidad para tomar decisiones que pueden afectar el funcionamiento de las actividades de la vida diaria (AVD), el cual esta principalmente causado por las deficiencias para tomar nuevos aprendizajes. El compromiso funcional habitualmente observado en pacientes con EM incluye dificultad para realizar compras independientemente, lavar ropa, planchar, cocinar, completar reparaciones en casa, manejar y usar transporte público26. Además, se ha demostrado que la calidad de vida (CDV) está disminuida en pacientes con EM, y correlaciona con disfunción cognitiva, depresión, mayor discapacidad, severidad y progresión de enfermedad, duración de enfermedad, disminución de la integridad cerebral en las imágenes por resonancia magnética (IRM), y disminución en la capacidad para realizar AVD26. Considerando que el inicio de EM ocurre entre los 20 y 40 años de edad, cuando los individuos están más activos y en plena etapa productiva, y que el 40% a 80% de individuos con EM se encuentra desempleado28, o que el 50% a 80% de pacientes con EM se encontrará desempleado a los 10 años del inicio de la enfermedad3, entenderemos porque el deterioro cognitivo es un factor muy importante (no obstante la discapacidad física es otro factor importante) en la contribución en el deterioro del funcionamiento social, ocupacional, de las AVD, y la CDV de los pacientes con EM. PATOGÉNESIS DE DETERIORO COGNITIVO EN ESCLEROSIS MÚLTIPLE Las lesiones neuropatológicas de EM incluye ruptura de barrera hematoencefálica, inflamación multifocal, desmielinización, pérdida de oligodendrocitos (OGC), gliosis reactiva y degeneración axonal29. No obstante, la destrucción inmuno-mediada de la mielina y OGC es considerada la patología primaria en EM, la principal causa de Rev Per Neurol 2009 Vol 11 21 Deterioro cognitivo en pacientes con esclerosis múltiple discapacidad neurológica permanente es la pérdida axonal30. Por ello, EM clásicamente ha sido reconocida como un desorden típico de la sustancia blanca (SB), la cual no explica en toda su extensión el deterioro cognitivo de los pacientes con EM; sin embargo, más recientemente, la desmielinización de los axones también ha sido reconocida en la sustancia gris (SG)31, la cual es extensa e independiente de la presencia de las lesiones de SB32. Recuerden que la corteza cerebral contiene mielina, pues muchos axones que se originan y terminan en las neuronas corticales son mielinizados; y existen varias razones que explican la falta de reconocimiento de lesiones corticales en EM: Primero, la mielina cortical no es fácilmente evidente con el examen histológico de rutina con coloración de luxol. Segundo, como las lesiones corticales no son hipercelulares no son evidentes a la tinción de hematoxilina/eosina. Y, finalmente las lesiones corticales son raramente detectadas por los procedimientos rutinarios de IRM33. La incidencia de lesiones corticales cerebrales en EM han sido reportadas desde 1962; así el 26% de lesiones cerebrales en EM compromete la SG, y 65% de las lesiones fueron localizadas en la unión leuco-cortical afectando tanto la corteza y la SB. El resto de las lesiones de SG fueron localizadas tanto en SG como en SB (15%), o completamente dentro de la SG (~19%)34. Basado en la distribución de la desmielinización cortical, tres tipos de lesiones corticales han sido descritas: lesiones tipo I, ocurren en la unión leuco-cortical, desmielinizando tanto SB como SG; lesiones tipo II, son lesiones pequeñas perivasculares, localizadas dentro de la corteza; lesiones tipo III, se extienden hacia la corteza desde la superficie pial35. Por otro lado, el número de células inflamatorias presentes en lesiones corticales tipo I, es significativamente menor en comparación con las lesiones de SB35, sin embargo no hay una clara explicación para tal hecho. Para tratar de explicar la lesión de la SG, varios mecanismos han sido propuestos y se dividen en primarios (se originan dentro de la SG) y secundarios (los daños se originan en la SB)32. Mecanismos patogénicos secundarios Luego de producida la desmielinización en la SB, se producen cambios en la expresión de los canales de sodio a nivel axonal, originándose sobre todo en las lesiones activas de EM una distribución anormal, difusa y extensa de canales de sodio tipo Nav 1.2 y Nav 1.6. Si bien es cierto este proceso de redistribución de canales iónicos es necesario para preservar algo de las propiedades de transducción; éste requiere una elevada producción de ATP celular, lo cual origina disfunción mitocondrial, exacerbada además por la sobreexposición a oxido ní22 Rev Per Neurol 2009 Vol 11 trico resultante de la cascada inflamatoria. Así, estos axones desmielinizados de la SB ingresan a un estado denominado de ‘hipoxia virtual’ que conduce a degeneración neuroaxonal en la SG. Por otro lado, se ha demostrado que los axones desmielinizados en la SB, así como los OGC, macroglía y microglía/macrófagos presentan concentraciones incrementadas de receptores ionotrópicos y metabotrópicos de glutamato y transportadores de glutamato comparados con los hallados en los cerebros de controles32,33. Mecanismos patogénicos primarios Dos son los hechos primarios que pueden explicar la lesión de la SG, e incluyen a la inflamación meníngea y la vulnerabilidad neuronal selectiva. Lo que no está claro aún es si los procesos patogénicos primarios y secundarios se presentan como procesos excluyentes uno del otro, o si, son procesos simultáneos, pero de hecho, tienen un efecto acumulativo en la desmielinización y degeneración de axones en la SG. Se ha demostrado que la inflamación meníngea, más que la inflamación en las lesiones corticales puede causar desmielinización cortical subpial, la cual se origina probablemente a partir de factores citotóxicos/mielinotóxicos, generados por folículos ectópicos de células B, aunque no se puede descartar el rol que juegan los mecanismos patológicos, relacionados a anticuerpos. Otra razón que explica el daño de la SG es la vulnerabilidad selectiva de poblaciones celulares neuronales específicas, similar a la observada en otra enfermedad neurodegenerativa como la demencia frontotemporal, y está basado en la disminución de la actividad del sistema colinérgico en dichas regiones, y la mejoría de los procesos cognitivos afectados, tras la administración de inhibidores de colinesterasa (IChE)32,33. Como podemos observar, la atrofia cerebral resultante, compromete tanto la SB, como la SG, y además las estructuras corticales y subcorticales de la SG, pueden desarrollar atrofia. Creciente evidencia indican que el deterioro cognitivo está relacionado en parte al daño de las áreas de la SG subcortical. Éstas, incluyen estudios demostrando estrecha relación entre la velocidad del proceso de la información y la tasa del bicaudado36, hipointensidad en T2 de los núcleos profundos de la SG37, y engrandecimiento de los ventrículos laterales38. La proximidad del tálamo al tercer ventrículo y la correlación entre volumen talámico y tercer ventrículo sugieren un rol del tálamo en el deterioro cognitivo del paciente con EM. Se ha demostrado que el volumen talámico es menor en pacientes con EM que en sujetos normales, y que la atrofia talámica en EM, correlaciona con la función cognitiva39. El tálamo forma parte del sistema límbico y del circuito de Papez, y media o regula muchas funciones cognitivas, como memoria, emoción, atención, humor, motivación y modulación del N Custodio, J Altamirano, R Montesinos, D Lira, J Escobar, H Torres lenguaje. El síndrome disejecutivo y la pobreza en la planificación son características comunes del trastorno cognitivo asociado con injuria del tálamo. Así, pues, la percepción simplista de deterioro cognitivo explicado por lesión de sustancia blanca que interrumpe los circuitos tálamo-corticales, característica de las llamadas demencias subcorticales, ha sido dejada de lado, para dar paso a la evidencia de la lesión de la SG tanto cortical, como subcortical; sin embargo, no queda claro si la lesión de cada compartimiento tisular tiene relación única con varias habilidades neuropsicológicas. De hecho, la SB compuesta de tejido conectivo mielinizado, esencial para la transferencia de información entre regiones cerebrales distantes, es más integral para la transferencia rápida requerida para las tareas de novel memoria de trabajo y tareas de atención complejas40. De otro lado, la SG paralímbica y neocortical puede ser más importante para la mediación de tareas que involucren memoria semántica de largo plazo o memoria episódica41. Los pacientes con EM y síntomas neuropsiquiátricos incluyendo depresión, euforia y desinhibición están relacionados con la carga de la lesión o con la atrofia cerebral total, aunque es posible están relacionados a pérdida de células neuronales de la SG42. EVALUACIÓN DE DETERIORO COGNITIVO EN ESCLEROSIS MÚLTIPLE El primer paso en el diagnóstico de deterioro cognitivo en pacientes con EM, aunque éste es fundamental en la evaluación de cualquier individuo, es el descarte de otras condiciones que puedan interferir en el desempeño cognitivo, como depresión, fatiga, ansiedad, medicación ansiolítica y anticolinérgica6,7. Luego; es importante, emplear una batería de pruebas neuropsicológicas (PNP) que pongan de manifiesto las posibles deficiencias en un corto espacio de tiempo, evitando de este modo que resulten interferidos por la fatiga propia de la enfermedad, y que pueda ser asimismo realizada por pacientes con importante discapacidad física. Los reportes de los informantes tienden a ser exactos, pero la evaluación neuropsicológica formal es el criterio estándar para identificar la verdadera severidad de la deficiencia cognitiva10,43. Las PNP deben incidir en todos los rasgos neuropsicológicos que pueden estar alterados en la enfermedad por lo que además de la evaluación elemental (la llamada evaluación neuropsicológica breve que incluye MMSE y prueba de dibujo de reloj) de demencia, y la valoración de la integridad del lenguaje, deben explorar la memoria con subtests para valorar los distintos subtipos, la capacidad de aprendizaje y la velocidad psicomotora entre otros. Así mismo, es conveniente realizar escalas de valoración de alteraciones emocionales, para evitar el sesgo que pueden producir en los resultados de las PNP. La Conferencia Internacional de Expertos en EM recomienda la batería diseñada por Benedict y colaboradores44, la cual está compuesta de siete PNP que evalúan fluencia verbal, habilidades viso-espaciales, memoria verbal, memoria viso-espacial, velocidad del procesamiento de datos, memoria de trabajo y funciones ejecutivas (Tabla 1). Las neuroimágenes estructurales han empezado a ser un elemento clave de diagnóstico en EM y en la evaluación de deterioro cognitivo, son un elemento importante de soporte diagnóstico, teniendo en cuenta que el diagnóstico de deterioro cognitivo es fundamentalmente clínico. A través de las IRM se puede medir la atrofia cerebral, atrofia cortical y volumen de la lesión. Los estudios han demostrado que los pacientes con mayor carga de lesiones tienen significativamente mayor disfunción cognitiva que aquellos con menor carga de lesiones45. Las mediciones de atrofia cerebral son particularmente sensibles en demostrar la relación entre integridad y estado cognitivo46. El ancho del tercer ventrículo tiene una estrecha relación con estado cognitivo, y además provee valor predictivo para cognición47. Por otro lado, atrofia del tálamo es un fuerte predictor para disfunción cognitiva, no obstante, no es necesariamente mejor que otras mediciones de las IRM, como ancho del tercer ventrículo o atrofia cerebral total48. Los estudios de imágenes de corte longitudinal han mostrado una fuerte relación entre los cambios en la función cognitiva y el incremento en la atrofia cerebral, además, la progresión de la atrofia cerebral en etapas tempranas de la enfermedad puede predecir el compromiso cognitivo que se presentará cinco años más tarde49. Tabla 1. Pruebas neuropsicológicas recomendadas para evaluación de deterioro cognitivo en EM Prueba neuropsicológica Evaluación de: • Test de asociación de palabras orales controlado Fluencia verbal • Test de orientación de líneas Habilidades viso-espaciales • Test de aprendizaje verbal de California Memoria verbal • Test de memoria viso-espacial breve Memoria viso-espacial • Test de la clave de números Velocidad de procesamiento • Paced auditory serial addition test Memoria de trabajo • Test de tarjetas clasificadas de California Funciones ejecutivas Rev Per Neurol 2009 Vol 11 23 Deterioro cognitivo en pacientes con esclerosis múltiple TRATAMIENTO DE DETERIORO COGNITIVO EN ESCLEROSIS MÚLTIPLE Las estrategias de tratamiento incluyen las medidas no farmacológicas y las farmacológicas propiamente dichas. En el contexto de las medidas no farmacológicas, el manejo de las causas que sobredimensionan o causan deterioro cognitivo como fatiga, mala calidad del sueño, medicación sedante o anticolinérgica y condiciones comórbidas pueden mejorar la cognición. Para los pacientes con quejas cognitivas persistentes, una estrategia adicional debe incluir la modificación del medio ambiente, como adaptaciones en el hogar o el lugar del trabajo, limitando las distracciones, estructurar las tareas, y ajustar las expectativas del desempeño laboral y doméstico26. No obstante, aun existen discrepancias sobre el rol de la rehabilitación cognitiva en individuos con EM; una revisión basada en evidencia de O’Brien y colaboradores concluyo que existen suficientes razones para plantear que las estrategias de rehabilitación cognitiva pueden producir un beneficio cognitivo50. Los programas de rehabilitación cognitiva para pacientes con deterioro cognitivo en EM, incluyen tareas dirigidas a mejorar deficiencias de atención, habilidades de la comunicación y compromiso de memoria. Las intervenciones farmacológicas para mejorar el funcionamiento cognitivo de pacientes con EM están enfocadas en terapias que modifican la evolución de la enfermedad y tratamientos específicos para mejorar la función cognitiva. Las terapias que modifican la evolución de la enfermedad emplean drogas que alteran el curso de la enfermedad de la EM. El problema con este tipo de terapias es que la valoración objetiva de la función cognitiva ha sido una variable secundaria de eficacia, por lo que no permite valorar el real efecto de la droga sobre la función cognitiva. Peor aún, estudios cortos y de pequeñas poblaciones muestran resultados heterogéneos. Un interferón beta-1a ha mostrado beneficio significativo sobre la velocidad del procesamiento, aprendizaje y memoria51. Interferón beta-1b ha mostrado un leve beneficio sobre la función cognitiva global52. No obstante acetato de glatirámero ha demostrado mejorar la fatiga en pacientes con EM, no otorga ningún beneficio cognitivo53. Si bien es cierto, no existe un tratamiento específico disponible para pacientes con desorden cognitivo en EM, un posible tratamiento puede estar basado en el uso de los IChE, los cuales han demostrado eficacia no solo en enfermedad de Alzheimer, si no, también en otros desordenes cognitivos como demencia con cuerpos de Lewy, enfermedad de Parkinson, demencia vascular e injuria cerebral traumática54. Los estudios pilotos con poblaciones pequeñas de pacientes con EM, han demostrado que fisostigmina y lecitina pueden mejorar la memoria, pero sus efectos colaterales han limitado su uso. Diversos estudios han evaluado el efecto de donepezilo sobre la disfunción cognitiva en pacientes con EM, sin embargo dificultades metodológicas, como la ausencia 24 Rev Per Neurol 2009 Vol 11 de un grupo control-placebo y pequeño tamaño de la muestra estudiada han limitado las conclusiones que se podrían obtener de estos estudios55. Krupp y colaboradores56 reportaron un estudio aleatorizado, doble-ciego, controlado con placebo de 24 semanas de duración que incluyó 69 pacientes con deterioro cognitivo en EM (aleatoriamente 35 recibieron donepezilo y 34, placebo). Los resultados mostraron que los pacientes tratados mejoraron la memoria verbal en cerca del 10%, respecto del promedio basal. Otras variables secundarias de eficacia relacionadas a la memoria verbal mejoraron significativamente en el grupo tratado, mientras que otras variables cognitivas no difieren entre los grupos. Diferencias estadísticamente significativas fueron encontradas en la impresión de cambio desde la perspectiva del paciente y del clínico; mayor número de pacientes tratados reportaron mejoría en la memoria comparado con el grupo placebo (66% vs. 32%) y más clínicos observaron mejoría cognitiva en el grupo donepezilo respecto del grupo placebo (54% vs. 29%). Los eventos adversos más frecuentes fueron diarrea (26%), nauseas (26%), espasticidad (17%) y parestesias (17%). Posteriormente, los autores reportaron el seguimiento longitudinal de IRM de 26 pacientes con EM en tratamiento con donepezilo. El reporte concluye que la atrofia cerebral fue la única medida que correlaciona con los cambios en la performance cognitiva en un periodo de 6 meses57. Recientemente, se han publicado, los resultados finales de un ensayo clínico fase II con rivastigmina en 44 pacientes con deterioro cognitivo debida a EM. Se trata de un estudio aleatorizado, doble-ciego, controlado con placebo. El cambio relativo en las pruebas de valoración de capacidades cognitivas no mostró diferencias significativas entre ambos grupos. Se observó una tendencia a la mejoría en los pacientes tratados frente al grupo placebo en el cambio en la puntuación global para el conjunto del rendimiento (p = 0,079). No se observaron diferencias significativas entre ambos grupos en el resto de variables secundarias de eficacia. El estudio ha demostrado que rivastigmina es bien tolerada y seguro en este tipo de pacientes, por lo que se plantea la necesidad de un estudio de fase III58. Por otro lado, amantadina, con frecuencia usada para tratar fatiga en EM, no ha demostrado beneficio cognitivo59. Asimismo, Ginkgo biloba, en un estudio aleatorizado de 38 pacientes con EM, muestra ningún efecto sobre la cognición60. En conclusión, el deterioro cognitivo es una entidad frecuente y poco reconocida en los pacientes con EM. Su expresión clínica no solo responde a las lesiones anatomopatológicas de la sustancia blanca, si no, también a la lesión que se produce en la sustancia gris, tanto cortical como subcortical. Se necesita una adecuada y programada evaluación neuropsicológica para no soslayar su presencia en cualquier etapa de la enfermedad. Los inhibidores de colinesterasa constituyen un promisorio tratamiento para el trastorno cognitivo en EM. N Custodio, J Altamirano, R Montesinos, D Lira, J Escobar, H Torres REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS 1. Lassmann H, Brück W, Lucchinetti CF. The immunopathology of multiple sclerosis: An overview. Brain Pathol 2007;17:210-218. 2. Love S. Demyelinating diseases. J Clin Pathol 2006;59:1151-1159. 3. Benedict RH, Wahlig E, Bakshi R. Predicting quality of life in multiple sclerosis: accounting for physical disability, fatigue, cognition, mood disorder, personality, and behavior change. J Neurol Sci 2005; 231:29-34. 4. De Castro P, Aranguren A, Arteche E, Otano M. 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